¡Toma Uno!

¡Luces, Cámara, Acción!

“¡Dios, no guardes silencio! ¡No calles, Dios, ni te quedes quieto!” es el clamor de Asaf según el salmo 83:1. ¿Por qué? Porque el ser humano no cree en un Dios de teoría sino en un Dios de acción.

El día de ayer tuve mi primer experiencia colportando. No vendí nada de libros, pero tuve la oportunidad de conocer a la viuda de Sarepta. Bueno, mas bien era la viuda de Hormigueros (Puerto Rico) –1 Reyes 17:8–. Yo, como siervo de Dios, le llevé la palabra en diferente clase de literatura. Sus ojos brillaban de luz al contemplar los materiales, y pude observar su ansiedad por obtener ciertos libros. Pero al final me contesto con un, “No… Tengo que pensar en mi nena… No tengo dinero para esto…”

Por más que le afirmé que no he visto justo desamparado ni su simiente que mendigue pan, ella decidió aferrarse a lo poco que tenía y no seguir el ejemplo de su compañera la viuda de Sarepta.

Hoy en día todavía existen Anas en llanto, Jacobs en angustia, viudas de Sarepta sin comida, Davids en persecuciones, mujeres enfermas buscando tocar el manto de Jesús, ciegos bartimeos queriendo ver…¡Pero la diferencia entre estos angustiados modernos y los angustiados bíblicos no descansa en la teoría sino en la acción!

Ana derramó su corazón ante el Señor por un milagro, Jacob luchó con Dios y se aferró de El hasta que lo bendijo, la viuda de Sarepta tomó un paso de fe y dependió de Dios, David se armó de valor, y con tres piedrecitas y el Espíritu Santo derribó aquel gigante, la mujer de flujo peleó contra toda una masa de gente para llegar hacia Jesús, el ciego bartimeo no dejó que la multitud lo callase y exclamó con todos sus pulmones hacia el Mesías…

¿Y tu? ¿Quién eres? ¿Serás un David? ¿Una viuda de Sarepta? ¿Un ciego bartimeo? ¿Un paralitico de Betesda? ¿Un Moisés? ¿Un Noé? ¿Un Elías? ¿Un Jeremías? ¿hmmm?

Pero la pregunta mayor es… ¿Te quedaras estancando en la teoría? ¿O tomarás pasos de fe, valor, y seguridad ante el Señor como lo hicieron estos héroes Bíblicos?

Nuestro Dios es un Dios de acción. Las luces ya están prendidas. Las cámaras son todos los hombres del mundo y todas las huestes celestiales que nos observan desde el cielo. El director –Jesús. ¿Fecha de filmación? ¡Todos los días! Cada escena de tu vida El la desea dirigir. Y lo mas lindo es que cuando te equivoques el te anunciará, “Toma dos! Toma tres! Toma cuatro!” y así sucesivamente hasta que lo hagas a la perfección.

Así como tu deseas que El actúe en TU vida, así mismo El desea que TU actúes DEPENDIENDO de El. Por la única razón que “el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder” -1 Corintios 4:20-.

Que Dios te bendiga.